viernes, 30 de noviembre de 2007

Fundación (Isaac Asimov)

Nos comentaba nuestro profesor de "Métodos y Técnicas de Historia Medieval" el otro día, que nosotros, como historiadores, debíamos huír de la historia-ficción: es decir, de imaginar qué hubiera ocurrido si en vez de esto, hubiera pasado lo otro. Hay millones de libros así, del estilo de ¿Y si Hitler hubiera ganado la segunda guerra mundial? o ¿Y si Albert Einstein nunca hubiera nacido?, al más puro estilo "What If" de la Marvel.
No se si nuestro profesor estará muy familiarizado con el ciclo de la Fundación del ya fallecido Isaac Asimov, pero su afirmación venía muy al caso para esa saga, que casualmente me estaba leyendo en ese momento.

Supongo que esto no es spoilear a nadie, pero por si acaso, aviso. El argumento básico del ciclo de la Fundación es el siguiente: En el futuro, hay constituído un gran imperio galáctico, cuya capital es el planeta centro-administrativo, Trántor. Un hombre, Hari Seldon, predice la destrucción del Imperio en cinco siglos, mediante una ciencia conocida como la psico-historia. Para reducir al mínimo el caos subsiguiente hasta la formación de un nuevo imperio, crea una Fundación en Términus, uno de los planetas más alejados de la galaxia.

Básicamente, la psicohistoria es una ciencia que se basa en datos estadísticos y el estudio de las masas, aplicando la matemática, psicología y sociología a la historia presente y pasada para poder deducir la historia futura. Cabe preguntarse... ¿sería esto posible? Evidentemente admitiendo un margen de error. Había una teoría en el siglo XIX (si no recuerdo mal) en la cual se trataba de explicar la historia por medio de ciclos recurrentes.

Una cosa sí que es cierta, y es que los eventos históricos no ocurren por la acción de individuos aislados. No ha de haber un Alejandro Magno, un Adolf Hitler o un Genghis Khan para cambiar la historia. Son hombres producto de su tiempo, y sin duda, si no hubieran sido ellos, habrían sido otros. ¿Eso quiere decir que la sucesión histórica es inmutable, que la inercia de la raza humana ya no deja lugar al azar en el devenir histórico? Evidentemente, ni tan siquiera las predicciones de Hari Seldon son exactas al 100%, pero el asunto da mucho que pensar. Ahí lo dejo. Mediten, mediten.

Para acabar de comentar el primero de los libros de la saga, que es el que yo he leído de momento, hay que decir que tiene precedentes claros de la saga de Star Wars, y yo al menos he encontrado tres. Se utilizan créditos como medio de pago, se viaja a través del hiperespacio (aunque esto es algo muy recurrente en la ciencia ficción), y Coruscant tiene un símil más que claro con Trántor, la capital imperial.

Asimov intenta, en este libro, emular el paso de la edad media, desde la caída del imperio romano, hasta el surgimiento del renacimiento. Ahí yerra, desde mi punto de vista, al considerar el medioevo como una época oscura, siguiendo la típica tradición histórica que se remonta desde el siglo XVI hasta las nuevas corrientes historiográficas del XX, que redefinen el periodo como algo más que una etapa olvidable y terrible de la historia de la humanidad.

En cualquier caso, una obra pretenciosa y muy recomendable, que da cabida a las elucubraciones filosóficas a las que nos tiene acostumbrado este genio de la ciencia ficción.

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